Herramientas indispensables para una crianza consciente

La crianza consciente les permite a los padres diferentes herramientas para una crianza educada y acompañar el crecimiento de los hijos desde el respeto y la empatía, conectando con sus necesidades y emociones. 

Este concepto de crianza aporta múltiples beneficios en la relación familiar, pues ofrece una filosofía de vida con un enfoque integral, adoptando lo mejor de los estilos tradicionales de educación, pero que se enfoca en la felicidad de los niños y dejarlos ser y sentir lo que les nace de forma natural. 

De igual forma, este tipo de crianza implica que los padres conecten con las emociones de sus hijos, para poder comprender mejor el motivo de algunos de sus comportamientos y aceptarlos sin juzgarlos; cabe destacar que no es un tipo de crianza permisivo, sino de aceptar y respetar el sentir de los niños. 

Principios básicos de la crianza consciente 

En la actualidad no hay una fórmula básica para saber cuáles son los pasos a seguir para alcanzar una crianza consciente, pero hay algunos principios que caracterizan este estilo de crianza:

Presencia: es importante estar cerca de los hijos, los niños desean que les presten atención para lo que ellos consideran importante, por lo que se trata de prestar atención plena que sientan que sus padres están con ellos en el lugar y en el momento que comparten. 

Respeto: los padres deben comprender que la infancia es una etapa hermosa de la vida, y que es de gran importancia el trato de ellos a sus hijos para su desarrollo emocional, de eso dependerá su futuro como adultos, es indispensable respetar a los niños como seres humanos también con necesidades reales y que deben ser gestionadas de forma consciente por los adultos. 

Contacto físico: es de gran importancia en la crianza consciente que los padres le demuestren cariño a los hijos con abrazos, caricias, besos ayudando a fortalecer la relación entre ellos.

Validación: en este tema se habla de darle valor a las necesidades y emociones, no quiere decir que aceptar todo lo que se hace, pero sí, empatizar con todo lo que están sintiendo en un momento determinado. 

Honestidad: los niños no aprenden con lo que los padres dicen, sino de lo que hacen, hay que enseñarles que sus padres son honestos, confianza para comprender la situación que los rodea, es importante dirigirse a ellos con la verdad, adaptando las palabras y la información según la edad que tengan. 

Intimidad emocional: en la crianza consciente es necesario crear espacios de conexión ya sea para jugar o comentarles acerca de situaciones y diferentes emociones que experimentan como adultos y padres, es importante que los hijos busquen refugio en sus padres para poder expresarse sin sentirse juzgados ni criticados. 

Finalmente, es importante que los padres acompañen a sus hijos con una crianza consciente, esto les permitirá mantenerse conectados a sus emociones comprendiendo y validando sus necesidades desde el respeto y el amor.